
Poner límites es una necesidad de los niños y cada uno lo pide a su manera
Llegan a la vida sin tener ni idea de nada y eres tú quien les va enseñando cómo desenvolverse.
Les estás ayudando a entender que vivimos con otras personas y respetando ciertas cosas les facilitará su vida. Por ejemplo, si llega un momento en el que comparten un piso o se van de viaje con amigos, el tener estar herramientas es un pronóstico de buenas experiencias. La persona que solo quiere hacer su voluntad, se convierte en aquel compañero con el que no queremos trabajar o ese amigo que vemos, pero con el que no queremos ir de viaje.
La convivencia en cualquier parte, familia, colegio, campamentos, trabajos…Implica saber cómo comportarse para sentirse bien en ese entorno.
Los límites ayudan a aprenderlo. En cierta forma a respetar el espacio de los demás y desarrollar el suyo propio. Son la brújula de su comportamiento.
Hay muchas formas de establecer unos límites:
- Normas y carteles cotidianos
- Normas de convivencia
- Haciendo cosas con él que aprenda correctamente. Por ejemplo: si vas de excursión a la montaña, enseñarle cuales son las señales e indicaciones, respetar las sendas, llevar bolsas de basura para los residuos y trasportarlos hasta donde se puedan tirar….
Pero tiene que entender que hay cosas que son negociables y otras no.
Cuanto antes lo entienda, mejor. Date cuenta que hay leyes y normas establecidas que hay que respetar a todos los niveles como las normas de circulación o las pautas que tenemos que seguir ahora por el COVID.
Muchas veces no va a ser fácil y te vas a encontrar con dudas. No pasa nada, sé constante, coherente, y piensa que estás haciendo por tus hijos lo mejor en ese momento.
Te voy a hacer UNA PROPUESTA
Primero tienes que acordar con tu pareja cuales son los límites que vas a poner y tenerlo muy claro.
Establecer normas de convivencia consensuadas con tus hijos y trabajar para que se respeten.
Dejar claro, según la edad, qué consideras que no es negociable. Tienen que asumirlo. A unos niños les cuesta más que otros, pero con las herramientas adecuadas, se consigue.
Te exige ser coherente en tus decisiones y comportamiento. Además, mostrarte firme y amable para que seas su brújula mientras crece y permaneces a su lado.